victor jara - te recuerdo amanda (1 de 3)

Ese tema no te conviene, la letra es espantosa de puros desencuentros domésticos y para qué va se van andar bailando tragedias. Yo no sé por que le dan tanto con la Amanda y el huevón del marido que debería haber trabajado el doble para que esa pobre mujer Amanda se quedara en la casa cuidando los hijos en vez de ir a buscarlo a la fábrica a puro molestarlo con estupideces. Esos cinco minutos la Amanda los debió haber ocupado para hacer las camas, barrer el piso, encerarlo. Y después el otro huevón se manda cambiar a la sierra en cinco minutos y deja a la otra pobre huevona destrozada, porque se da cuenta de que el Manuel le se fue a la sierra a ponerle los cachos. En cinco minutos, por huevona, la Amanda quedó destrozada, más encina mojada cagada de frío. Alega por la lluvia la chucha de su madre. Fíjate la mujer quejosa, que se ponga una bolsa de plástico la muy huevona. Si llueve obviamente la calle va a estar mojada o no. Y si el Manuel tuvo un accidente, por qué no fue hablar con su supervisor para que le pasara las llaves del botiquín, porque seguramente el Manuel sin saber leer, ni se enteró lo que decía el cartel con las instrucciones de emergencia y la prevención de riesgos laborales que en todas las fábricas hay.

(La Amante Fascista, fragmento, de Alejandro Moreno)

the cure - fascination street

(play al widget de Grooveshark y esto funciona mejor)

So let's cut the conversation and get out for a bit

Se siente ese placer del hundimiento, pero no en un mal sentido, no en una forma negativa sino es el fade constante, espiral y envolvente de lo que te está rodeando en ese momento. Jirones de conceptos unidos a ideas retazos destartalados que se van construyendo como una unidad lógica única, irrepetible y de segunda mano pero tan grandiosamente confeccionada que luce como nueva.

Because I feel it all fading and paling

And I'm begging

To drag you down with me

Evasión, un concepto que suena peyorativo, pero a su vez es tan completo y nítido. No sabes donde vas, sólo sabes que vas y que siempre puedes volver. Lo mejor es nunca ir solo. Y en otro sentido, qué es una cómoda alfombra peluda al lado de esa mujer que inventamos caminando por todos esos paisajes saboreando una melodía relativamente nueva mientras se intenta descifrar (léase construir) qué pasa por su cabeza en el momento mismo que proyectas una inflexión del rostro, un movimiento corporal, un cambio de paisaje repentino.

Y la calle, no miras a nadie, haces que no miras a nadie pero los miras a todos, si no cómo aprender de ellos de otra formas que no sea mirándolos obsesivamente, auscultando, adivinando, errando y acertando. Ella no está deprimida, sólo tuvo una mala mañana, él es de los tuyos, esa mujer parece haber tenido una vida dura pero se ve feliz. ¿por qué? ¿por qué? ¿por qué?

Y ahí aparece esa mujer de nuevo, mientras sigo masticando melodías nuevas en mi cabeza, cambios inesperados y sonidos sacados de una maquina del tiempo, la música se está volviendo un gran deja vú ¿sabías? bandas sobrevaloradas que nunca fueron nada, y musiquita hipster que imita pretenciosamente cosas que alguien más ya hizo, pero ahí está sonando en los parlantes invisibles de la calle, mientras ella sostiene un paraguas vestida como de otra época. Todo me gusta, y siento sobre mi se reproduce la definición más alquimista de la fascinación.

Quiero alcanzarla y preguntarle, pero en eso todo se va a negro, yo también hasta que aparezco respirando por mi ventana y el parlante que insisto en buscar tras los árboles o escondido en las cornisas de los edificios sigue cantando mientras todos se voltean hacia nosotros para seguir la letra con sus labios:

So pull on your hair

Pull on your pout

Cut the conversation

Just open your mouth

Pull on your face

Pull on your feet

And let's hit opening time

Down on fascination street

Down on fascination street

Down on fascination street

Los videoclips de mi cabeza son los mejores que haya visto alguna vez.